23 de diciembre de 2010
Si no fuera por la banderita norteamericana, no se notarían los papeles del estado de ánimo. Lo que sí ha pasado es que Assange desapareció del periódico. Olvidado de la prensa, caerá en manos de un juez corrupto.
Por ese motivo yo me llevé siempre mal con la prensa, porque llevarse bien no sirve para nada.
Psicoanalista, jubilado en parte
No hay comentarios:
Publicar un comentario