18 de diciembre de 2010
La Unión Europea reconoce que ha perdido interés para Estados Unidos. Pero el sometimiento moral es, a veces, más grande que el sometimiento económico.
Si Europa no despierta, los contratos millonarios que China hubiera preferido firmar con Europa, se los quedará EE.UU. y cuando se libere el comercio en Cuba, será todo de EE.UU.
Europa tendrá que despertar de su letargo y cambiar un poco su moral.
Darse cuenta, de una vez, de que toda la culpa de la crisis actual, que es muy grande, no la tiene España y ni siquiera Alemania o Francia, sino el ahogo de las hipotecas basura y, más fundamentalmente, el mercado inmobiliario en Estados Unidos.
¡Viva el imperio, aunque caiga!
Psicoanalista, jubilado en parte
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